Quiero entablar un juicio contra mi corazón, lo acuso de malversación de fondos, de las montañas de sueños y esperanzas que supe tener y ya no están, de estafa por haberme engañado, por haberme “vendido” ilusiones, sueños rotos, por lograr que me vuelva a enamorar, aun sabiendo que iba a perder antes de empezar.